Segunda derrota consecutiva en El Toralín, que tras una primera vuelta invicto ha visto como en esta segunda ronda de la Competición se le escapan los puntos como si hubieran quitado el tapón del sumidero. Para más INRI la derrota no ha podido ser más aciaga y dolorosa.
Los jugadores celebran el, a la postre, inútil gol de Yuri.
Se presumía que esta serie de dos partidos en casa iba a dar a la Deportiva el empuje necesario para no descolgarse de los puestos que dan opción a jugar el Play-Off de ascenso. Al menos para no quedar descolgados del más directo rival por el puesto, el Real Zaragoza. Pero claro, luego resulta que llega la realidad y te das de morros con ella. No digo, nadie me malinterprete, ni que la temporada está terminada (hay que conseguir la salvación) ni que la misma esté siendo mala (nadie en su sano juicio calificaría la temporada que estamos haciendo de tal forma, o le podéis preguntar a los aficionados del Recre o el Lugo o el Albacete a ver si se cambiarían por nosotros). Lo que sí digo es que este tipo de partidos se nos están escapando con mucha frecuencia, demasiada diría yo, y eso no puede ser así. Porque un partido que en el minuto 89 lo tienes ganado, no puedes acabar perdiéndolo. Creo que hoy Manolo se equivocó, y mucho con algunos planteamientos tácticos y que eso pudo costarnos el partido. Seguro que sí y él lo sabe. Pero no nos quedemos mirando el dedo y miremos la luna. No es sólo José Manuel Díaz el que tiene que cargar con toda la culpa. Él tiene su parte de responsabilidad, él plantea mal tácticamente el partido y tiene que corregir el error en el minuto 35. ¿Pero cuántas veces habéis visto este partido en El Toralín y no sólo esta temporada? ¿Os tengo que recordad al Xerez que vino aquí y se lo llevó crudo? ¿O al Tenerife la temporada pasada? ¿O al Recre que nos remontó con una contra que no supimos parar cuando un jugador nuestro tenía el balón en la esquinita para intentar matar el partido? Esto no es de ahora. Porque muchas veces pasamos de soslayo sobre la responsabilidad de los que al fin y al cabo están disputándose los tres puntos, que son los jugadores. Y hoy hubo en algunos casos falta de actitud y en otros, suficiencia. Porque la Deportiva tuvo ocasiones más que de sobra para cerrar un partido que, jugando mal y con todos los errores que hubiera o hubiese podido cometer el entrenador, iba ganando. Y lo iba ganando porque era superior en calidad al rival. Y puede que no sean siempre los mismos jugadores los que conforman la plantilla en los casos que os he citado antes, pero se repiten actitudes, porque los futbolistas son casi todos iguales. Todo eso unido, claro está al bajón físico que pega el equipo en estos meses de temporada debido a que tiene que entrenar en unas condiciones lamentables. Aquí culpas hay para todos, desde Silvano hasta Franganillo, no nos hagamos ahora los dignos. Que mientras Cristian chupa grada, Borja Valle se la saca semana sí, semana también en Oviedo. Es más la afición tambien tenemos nuestra parte de culpa. El Club propone cantar el "A Ponferrada me voy" antes del partido y no lo canta ni el Tato. Creo que era el único en mi zona que lo empezó a cantar y al final tuve que susurrarlo solo. Por vergüenza, casi. Porque cada vez que se da un pase atrás para iniciar una jugada que no está clara, se pita. Porque yo he oído hoy cuando Vicente se quedó ante Kepa en el mano a mano "Metéselo" y celebrar que nos metieran un gol. Señores, así no eh, así no. Todos tenemos que poner un poquitito de nuestra parte, que esto parece el puto Bernabeu, lleno de pipas y radios, que aplauden al rival y pitan al jugador propio con la excusa de que el que paga, manda.. Todos tenemos nuestro poquito de responsabilidad. Esta crónica no está quedando como lo tenía pensado, el título, que no voy a cambiar, es buena muestra de que mi intención era hablar más del partido y de las ocasiones marradas y de la cara de gilipollas que se te queda cuando palmas en dos minutos, pero es que hoy no me sale otra cosa. Estoy cabreado, decepcionado, dolido, seguro que como todos vosotros, pero yo, por lo menos, tengo esta manera de dar rienda suelta a esos sentimientos, que si ahora mismo no os embargan, amigos... bueno, lo voy a dejar ahí, que no quiero que me digan que reparto carnés de nada. Hay que olvidar rápidamente este partido, ponerse las pilas todos, repito TO-DOS y seguir hacia adelante. No somos los únicos que vamos a fallar y aún queda liga, podemos reengancharnos a la ilusión que nos creaba el equipo hace no tanto, pero tenemos que poner de nuestra parte. Hoy el equipo se ha retirado con una pitada, era lo propio. El próximo domingo hay que animar desde el minuto 1 y hacer sentir a los jugadores que estamos con ellos y que aquí nadie se baja del barco. Y si ellos no corresponden como se merece, al final, como hoy, se vuelve a pitar si hicera falta. La crítica no es histerismo y no sólo es buena sino que es necesaria. Hoy se critica, porque se debe y cuando haya que alabar se alaba, pero hoy no es ese día. Mientras tanto disfrutemos de que no pasamos apuros, que estamos a tiro de piedra de un sueño y de que el equipo va a mejorar y a volver a jugar como hace bien poquito. No ayuda estar amargado permanentemente, os lo digo yo. Cabrearos, sí, pero mirad el lado positivo, que de momento todavía lo hay. Si las cosas se tuercen más llegará el momento de preocuparse, pero ya cruzaremos ese puente cuando lleguemos a él, si es que llegamos. Ahora os dejo con las crónicas, las ruedas de prensa etc..
Por supuesto no tenemos acertantes de la porra, no esperaba otra cosa, por lo que la clasificación sigue como estaba. La próxima semana tenemos una buena oportunidad para lamernos las heridas ante un rival que no atraviesa una buena racha y que nos visita como es el Sabadell del amigo Cristian al que yo estoy esperando para felicitarle las Navidades. Ese partido tendrá lugar justo dentro de 7 días, a la misma hora y día que el de hoy, Domingo 16:00 en El Toralín. Esperemos que no nos llevemos otra decepción, aunque estoy convencido de que la semana que viene vamos a ver un buen partido con el que los jugadores nos pedirán perdón por la cagada de hoy. Un saludo.
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