lunes, 17 de febrero de 2014

Jarro de agua helada

La Deportiva volvió a caer derrotada en su feudo ayer frente al Alcorcón en un partido que podía ser para alcanzar cierta tranquilidad clasificatoria y que al final sólo sirvió para comprimir un poco más la tabla, si cabe.

Rubén Sanz saca el córner que adelanta al Alcorcón.
Tras la derrota y el pobre juego del equipo ayer es fácil ser pesimista pero prefiero quedarme con los aspectos positivos, que los hubo (aunque no lo parezca). No es poner paños calientes a una derrota es alabar una actitud y un trabajo que a este grupo no se le puede negar por las condiciones en las que trabaja en el día a día y por el terreno de juego que se encuentra cada 15 días cuando juega en casa. Todo era favorable para sumar tres puntos. Horario, tarde primaveral e iniciativa por parte del Club para atraer más gente a las gradas y que funcionó, hasta cierto punto. Todo, salvo el césped, que estaba impracticable incluso para jugar al rugby, pero no es excusa, el campo está igual para todos. Incluso el inicio del equipo, bien plantado, dominando y llegando invitaba al optimismo. Era la ocasión propicia para hacer bueno el punto obtenido en El Molinón Claudio optó por no cambiar lo que funcionó en Gijón y dejó la defensa intacta, y se echó algo de menos la profundidad de Carpio por la banda derecha. Javi Lara tampoco fue de la partida, y ayer se podía haber hinchado a meter goles de falta, pero cuando salió al campo ya no hubo ninguna buena para él. De todas formas todo se truncó a los 10 minutos de juego. Córner botado por Rubén Sanz que Babin remató a la red sin apenas oposición. Era la primera llegada de un Alcorcón que hasta ese momento había estado subyugado por una Deportiva eléctrica y con llegada. No llegarían mucho más los alfareros en los primeros 45 minutos. Un par de disparos sin peligro desde la frontal que atajó Santamaría sin dificultades. La Deportiva apenas acusó el golpe, era temprano y había tiempo para la reacción. Siguió ejerciendo el mando sobre el juego, pero se encontraba con una muralla difícil de traspasar y con un campo de minas a sus pies. Los tres de arriba se movieron bien y buscaron los espacios pero era imposible controlar un balón en condiciones de ser jugado. No obstante la Deportiva apenas inquietó al cancerbero amarillo hasta casi 10 minutos del final. Primero con un disparo lejano que atrapó el meta sin dificultades. Poco después con un remate blando de Dieguito (el balón iba casi sin fuerza y era difícil darle potencia y dirección a la vez) que fue a las manos de Dani Giménez. Poco después el portero sería decisivo para su equipo. Ahora que he nombrado a Dieguito tengo que decirlo, aun a riesgo de ser machacado. A mi me gustó. Creo que le falta fuste para ser un jugador de Segunda, pero eso se va cogiendo con tiempo y minutos, pero la madera la tiene. Se mueve bien y busca espacios, controla bien de espaldas y no da un balón por perdido. Igual nunca llega a ser un killer, pero es uno de esos delanteros tan necesarios para que otros luzcan, tipo Máyor. Ayer lo dio todo, que es lo menos que se le puede pedir y tampoco tuvo demasiadas ocasiones de cara a gol, por lo que en esa faceta no se le puede juzgar. Para ser su primer partido completo, creo que fue de los destacados. Falta en la frontal tras una gran internada de Acorán que es derribado. Ante la falta de lanzadores específicos, Robusté se animó a pegarla. No estaba yo muy convencido con el lanzador, pero me tuve que callar la boca cuando el catalán empalmó un pepinazo tremendo ante el que Dani Giménez tuvo que realizar la parada de la tarde. El balón le pilló a contrapié y tuvo que sacar el brazo con fuerza para que el chutazo no se lo doblara y poder despejar a saque de esquina.

Rueda mandó al larguero este trallazo.
En el segundo acto la Deportiva siguió con brío. Un par de aproximaciones dieron aviso de lo que se iba a encontrar el Alcorcón en los siguientes minutos. La Deportiva encerró a los alfareros en su área y se defendieron como pudieron de las embestidas locales. Entre el minuto 10 y 20 los amarillos sufrieron para mantener su portería a cero. Rueda chutó al larguero un libre indirecto dentro del área por pérdida de tiempo del arquero visitante. Varios centros y remates locales tuvieron que ser despejados por la zaga in extremis y Dani Giménez realizó otro paradón al saque de una falta esquinada. Ayer la pelotita no estaba de entrar y no entró, por más que lo intentaran los de Claudio no había el punto de suerte necesario para que esas ocasiones se transformaran en guarismos en el luminoso. Fue entonces, tras este asedio la Deportiva se tomó un breve respiro para aclarar las ideas y reanudar el ataque con hombres más frescos. Entraron Berrocal, Marquitos y Javi Lara para dar aire fresco al ataque. Incluso el Alcorcón tuvo una buena ocasión en un remate de cabeza algo forzado que Sanatamaría detuvo sin problemas. Tras los cambios la Deportiva lo siguió intentando, Acorán no pudo completar el pase de la muerte tras una buena jugada individual y Robusté envió fuera un remate de cabeza franco y sin oposición que pudo suponer el empate. Rozó el gol el catalán por dos veces, pero ambas se le escurrió entre los dedos. Fueron casi los últimos coletazos de una Deportiva que no se rindió y que buscó el gol a la desesperada, pero que no encontró la manera de llegar hasta él. Y lo que suele pasar en estos casos sucedió. Con el equipo volcado los de Bordalás hilaron una buena contra y Antonio Martínez se fue de Alan con un gran regate y fusiló a Santamaría, que nada pudo hacer por evitar la sentencia alcorconera. El partido sólo dio para que Berrocal, en el descuento viera la roja por una entrada fea, fruto de la desesperación y de que apenas le llegara un balón en condiciones. Quiso agradar el chaval, pero no pudo, tendrá mejores ocasiones, seguro.

Lo que más me gustó:
  • El ambiente en el campo. La buena hora, la tarde primaveral y los precios populares alentaron el hecho de que hubiera más gente en la grada. Hubo animación cuando el equipo buscó con más fuerza la remontada y seguro que los jugadores se sintieron espoleados. Al final no pudos ser, pero hubo momentos en que parecía que habíamos retrocedido 8 años en el tiempo.
  • El equipo no se rindió. Encajó un gol pronto, pero tomó las riendas y no se amilanó. Apenas acusó el varapalo, tuvo ocasiones pero no suerte para materializarlas y al final le cazaron en una contra para sentenciar. Sin que el juego fuera excelso (fue bueno en algunos tramos), el equipo puso casta, pundonor y orgullo, empujó a la afición a animar y se sintió empujado por la grada y el esfuerzo es de agradecer.
  • El mejor del partido: Dani Giménez. El meta alfarero fue clave para que su equipo consiguiera la victoria y lo hizo con varias paradas brillantes.
Lo que menos me gustó:
  • Otra vez volvemos a lo de siempre, pero hay que repetirlo, el césped. No es de recibo que un Club de la Liga Profesional tenga ese terreno de juego. La Directiva debe tomar cartas en el asunto y el césped debe ser cambiado a como dé lugar. Si eso repercute en la confección de la plantilla, que así sea, pero en Segunda B hay muy buenos jugadores para confeccionar una plantilla de calidad suficiente para garantizar la permanencia una temporada más. Sino que pregunten en Eibar.
  • La desbandada final. Con el segundo gol alfarero se produjo una desbandada general de la afición que dejó el estadio párcticamente vacio. Yo creo y como tal actué, que el equipo se merecía un aplauso por el esfuerzo realizado aunque el resultado no fuera bueno. Los chavales lo dieron todo y eso hay que agradecerlo, que nos hemos vuelto muy señoritos.
  • La falta de suerte de cara a gol. No voy a lamentar la baja de Yuri, porque de nada sirve, pero bien es cierto que sin el brasileño las opciones no sólo de marcar, sino de que pase algo diferente se reducen exponencialmente. Ayer hubo ocasiones y no se materializaron, faltó la suerte, pero lo bueno es que las ocasiones estuvieron, solo que unos días entran y otros no.
Hoy no hay moviola, fue un partido apacible. La única jugada discutible sería la roja a Berrocal, pero visto el resumen es roja como un castillo, así que nada que añadir por mi parte a la actuación arbitral. Ahora ya dejo las crónicas, resúmenes, etc.. No he encontrado la Rueda de Prensa de Bordalás, así que no la pongo, lógicamente.







La Deportiva termina la jornada 26 en 15ª posición a 3 puntos sólo del descenso dado que esta jornada los de abajo han ganado casi todos y la clasificación se ha apretado aún más si cabe. El siguiente partido de la Deportiva será el próximo domingo 23 a las 17:00 horas en el Rico Pérez frente al Hércules. Será retransmitido por LaLiga.tv, dado que no hay televisión. Un saludo.

Pasadlo bien y disfrutad del juego.

1 comentario:

jairo F.Quindós dijo...

Una lastima por que nos acercamos al los puestos calientes